[Compilador: Oscar Lobo i Oconitrillo]
La mesa larga en casa de tía Cavita, en el centro de Guadalupe de Goicoechea, era pródiga del pan de cada día. A las cinco de la tarde había fiesta con la olla de verdura: yuca, tiquizque, papa, ñampí, ayote y tacacos. Sentados en torno a la mesa rústica, cercana del fogón, sobre un piso de tierra que “rechinaba de limpio”, la prole de los tíos Cavita y Noé, las hijas de la tía Tina, también guadalupanas, y mis hermanos y yo que veníamos del distrito de San Francisco, conformábamos la catizumba de carajillos y adolescentes de vacaciones, en los años sesenta…
Descargue el boletín.
©2017 Amerindia - Todos los derechos reservados.